5 de agosto de 2009. Puerto Real-Valladolid. Primera etapa
8:15 de la mañana del 5 de agosto, miércoles, día señalado para nuestra salida camino de Francia. Vamos cargando las maletas con los nervios habituales de un comienzo de viaje. Después de mucho debatir y pensar la decisión final es que nos marchamos en nuestro coche, en ruta hacia las tierras de Francia. La mañana no es excesivamente calurosa. Tras cruzar el pueblo entero en busca de una gasolinera que ofrezca dignamente este servicio, conseguimos por fin revisar la presión de las ruedas. Entre lo uno y lo otro son casi las nueve y media cuando nos incorporamos a la autopista.
Tras dejar atrás Sevilla y el Puente del Quinto Centenario, tomamos la autovía de la Ruta de la Plata. Aunque te sientes un poco solo en cuanto a áreas de servicio, gasolineras y merenderos se refiere, el trayecto es cómodo, además, por fin, después de muchos años de obras, hay una autovía digna. El paisaje aletarga el ánimo desde Almendralejo hasta Baños de Montemayor, en la frontera con la provincia de Salamanca. En Baños de Montemayor hacemos parada para comer y descansar un poco.
Baños de Montemayor, en la provincia de Cáceres, es un aliviado baño, nunca mejor dicho, de verde frescor. Esta bonita población del norte extremeño es un auténtico vergel tras los muchos kilómetros de aridez. Si tenéis tiempo y ganas no os marchéis de aquí sin tomar un rico vino de pitarra.
Llenamos el depósito y volvemos a la ruta. A pocos kilómetros nos da la bienvenida Castilla y León, la provincia de Salamanca y el bello paisaje de las Sierras de Béjar y Francia. Pero no hay que engañarse, tras estas agraciadas sierras reaparecerá la meseta castellana y con ella la aridez del estío. Unas decenas de kilómetros más adelante la bella silueta de la ciudad de Salamanca nos avisa de que nuestro destino está cada vez más cerca.
Sobre las seis de la tarde llegamos al hotel Ibis-Valladolid, donde haremos nuestra primera noche de descanso:
http://www.ibishotel.com/es/hotel-3204-ibis-valladolid/index.shtml
El calor es opresivo al salir del coche. Nos duchamos, descansamos un poco y a las 8 de la tarde, con la esperanza de que el calor haya amainado, nos encaminamos hacia el centro de Valladolid. Aparcamos poco antes de la Plaza de Zorrilla y al salir del coche descubrimos que nuestras esperanzas en cuanto al calor se han visto frustradas, pero no nuestras ganas de conocer algo de esta ciudad que a primera vista resulta pulcra e interesante.
Por el Paseo de Zorrilla, bonita avenida con terrazas y tupido arbolado, llegamos hasta el Campo Grande, castizo pulmón del centro de Valladolid:
http://es.wikipedia.org/wiki/Parque_del_Campo_Grande
De coqueta estructura, es un oasis de frescor en medio del asfixiante calor, sobre todo la zona del lago, donde un simpático y muy experimentado marinero de agua dulce pasea a los niños en barca por este bonito rincón. El paseo en barca por el lago sirve, además, para que Alejandro haga un nuevo amigo, casualmente tocayo y de la misma edad. Un chavalín vallisoletano muy simpático y sociable el cual, más tarde, dará pie para que Alejandro tenga su primera cuenta en el Messenger, y de esta manera poder hablar con su nuevo amigo y no perder el frugal contacto de esta tarde de verano.
Nos encaminamos por animadas calles peatonales hacia la Plaza del Ayuntamiento, bonita plaza y aún más bella la Casa Consistorial. Es hora de calmar el apetito y para ello nada mejor que preguntar a los lugareños, gente, por otra parte, estos vallisoletanos, muy corteses y dispuestos a ayudar en todo momento. Son varias las sugerencias y entre todas gana la partida un local llamado La Tasquita:
http://valladolid.salir.com/la_tasquita-calixto_fernandez_de_la_torre_5
La Tasquita, inmejorable, por precio, calidad, variedad. La selección de tapas es amplia y exquisita y el vino aún mejor. Absolutamente recomendable.
Después de tan sabrosa visita, y en vista de las muchas sugerencias recibidas, vamos hacia otra, muy cercana; La Mejillonera. Este local es famoso por sus patatas bravas y por los mejillones, servidos de diversas y apetitosas maneras.
Satisfecho el paladar es hora ya de volver al hotel, mañana toca madrugar para seguir la ruta, nos espera Francia.
Podéis encontrar más en estas direcciones:
http://arauzfrancia08.blogspot.com/
http://nuestrosviajesfalypili.blogspot.com/
Gracias por vuestra paciencia.
Rafael Arauz © 2009